Domingo Mestre

Ante todo, agradecer a la profesora Dra. Janice Martins Appel su invitación para incluir mis palabras en esta exposición cuyo título, Arquipélago, me encanta, pues “Archipiélago: conjunto de islas unidas por aquello que las separa” era el lema de una emblemática revista española de crítica de la cultura, hoy desaparecida, en la que tuve el honor de colaborar y con cuyos libertarios principios sigo identificándome. Partiendo de esta definición, entiendo que el Observatório de Arte Pública, Entorno e Novos Géneros FURG-CNPQ, del que formo parte como investigador invitado, podría ser considerado una de las “islas” conceptuales de este archipiélago expositivo en el que las diferentes propuestas del Área de Artes del ILA de la FURG cumplirán acuáticas funciones, tanto de unificación como de diferenciación del conjunto de los participantes en la muestra.

            Al igual que la cercana Ilha dos Marinheiros, que contiene una formación lagunar en su interior (la Lagoa da novia), nuestra “isla de investigación” contiene hasta siete recipientes de vidrio llenos de agua, cual si fueran metafóricas lagoinhas, en cuyo interior se muestran, sumergidas, algunas referencias a las diferentes poéticas del Observatorio. Referencias que lo son, también, de las principales líneas de investigación de nuestro Grupo, marcado por la insoslayable influencia de las aguas en el entorno geográfico de la FURG. Y al igual que sucede con las gotas de lluvia, cuando tras la tormenta son iluminadas por el sol, que descomponen la luz del espectro para hacer visibles los siete colores que lo componen, nuestras siete lagoinhas hacen visible, a través de los diferentes colores que las “iluminan”, la rica y compleja policromía del Grupo de Investigación.

            Si volvemos la vista atrás, vemos que los artistas modernos de los siglos XIX y XX fueron agentes fundamentales para la progresiva democratización de las sociedades occidentales. Algo que se consiguió por medio del acceso generalizado a la cultura y, sobre todo, a través de liberación del gusto de la tiranía aristocrática implantada por las élites de sangre, tanto en Europa como en sus colonias. Gracias a ellos, las artes se liberaron de sus respectivos cánones y se dedicaron a explorar el mundo sensible con entera libertad. Y para referirse a la actual situación, se dice en español “para gustos: colores”. Una forma de aludir a la gran libertad de expresión imperante en nuestros días.

            Siete colores, pues, son los que presentamos aquí, acompañando a las correspondientes historias de vida cuyas líneas de fuga tienen en común el compromiso con el arte y la poesía, pero también con la sociedad que los acoge. Siete formas diferentes de observar lo que (nos) pasa en el territorio de influencia de la FURG. Siete miradas de artista que exponen y se exponen, de forma simultáneamente individual y colectiva, para recordarnos que no podemos disfrutar de la belleza del Arco Iris sin la imprescindible presencia de la lluvia.

 

            Domingo Mestre